Cómo regatear el precio de productos

Cómo regatear el precio de productos

En épocas de viaje o cuando vamos a mercadillos que se organizan cerca de nuestra ciudad, muchos nos sorprendemos al no ver precios en algunos productos y, cuando preguntamos al vendedor, nos pide una cantidad que nos parece desorbitada, pero no está todo perdido, deberemos regatear.

El regateo es una de las formas más antiguas de pago y consiste en que vendedor y comprador lleguen a un acuerdo ofreciendo un precio cada uno, hasta llegar al que ambos consideran mejor. Hay que decir que no siempre acaba cediendo uno, pero jugamos con la ventaja de que sabemos que, si regatean, es porque el precio real no es muy caro. Hoy os traemos algunos consejos para que, a la hora de regatear, podáis salir vencedores y haceros con todo lo que queráis.

  • No seas muy simpático. Los vendedores suelen aprovecharse de la gente simpática, y suelen hacer ellos de poli malo, lo que puede jugar en contra nuestro. Mantenerte serio y hablar tranquilo, piensa que puede llevarte un rato el regateo.
  • No te creas que por haber conseguido un buen regateo una vez vas a conseguirlo en todos. No vayas predispuesto como «el mejor» ni tengas aires de ganador, hazlo como si siempre fuera la primera vez pero utilizando las técnicas que ya te han salido bien.
  • Aunque estemos en un país extranjero, la mayoría de vendedores se conocen los números en nuestro idioma, por eso, si vamos con alguien y queremos hablar de precios, deberemos hacerlo antes de comenzar el regateo, si no, la otra persona puede utilizarlo en nuestra contra.
  • Algo muy útil es no dejarle claro al vendedor que quieres algo en concreto. Muchas veces vamos buscando una cosa y, cuando la vemos, se nos iluminan los ojos y nos volcamos en conseguirla. Pregúntale por una cosa, y por otra y por otra para que crea que no vas buscando algo específico. De esta forma, no creerá que pueda conseguir la venta tan seguro y será más flexible.
  • Nunca enseñes tu cartera ni dejes ver cuánto dinero llevas encima. También es importante que, cuando ellos te digan el primer precio, que será exagerado, tú digas uno muy bajo, para que puedas maniobrar entre tu precio y el suyo.
  • Y por último, está la técnica final. Coges en tu mano el dinero máximo que estás dispuesto a gastar, se lo enseñas y le dices que por eso te lo llevas. Si no acepta, vete, la mayoría de las veces irán detrás de ti para aceptar lo que les has ofrecido.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *